El mercado de motocicletas en México ha experimentado un notable crecimiento y evolución a lo largo de su historia. Desde su introducción en el país a principios de 1900, las motocicletas se han convertido en un medio de transporte popular y una parte integral de la cultura y economía mexicana.
En la primera mitad del siglo XX, las motocicletas fueron importadas a México desde Estados Unidos y Europa, no obstante, eran consideradas un lujo. Después, de 1950 a 1970, con la introducción de las motocicletas japonesas, se popularizaron como una opción de transporte accesible.
La demanda creció en las áreas urbanas, donde ofrecían una solución ágil y eficiente para la congestión del tráfico. En esta época, también hicieron apariciones estelares en el Cine de Oro mexicano. Esta etapa dio paso a la formación de la cultura de la motocicleta en 1970 y 1980, y sus clubes y eventos comenzaron a ganar gran popularidad.
En las décadas recientes el mercado de las motocicletas en México ha crecido significativamente. Las mejoras en la infraestructura vial, el aumento del tráfico y la necesidad de movilidad rápida y eficiente han impulsado su demanda.
Su oferta se ha diversificado con la llegada de más marcas nacionales e internacionales: una amplia gama de modelos y precios que se adaptan a diferentes gustos y necesidades.
Sin embargo, como resultado de ello, el mercado de motocicletas también enfrenta desafíos importantes que requieren total atención: de aquí la relevancia de unir esfuerzos entre los actores relacionados al sector, principalmente entre los fabricantes e importadores y las autoridades.
La Asociación Mexicana de Fabricantes e Importadores de Motocicletas (AMFIM) surge como respuesta ante los retos de la movilidad moderna, preponderando la seguridad vial y la concientización sobre el uso responsable de las motocicletas.
Igualmente, la asociación será una pieza clave para encaminar la transición hacia vehículos más amigables con el medio ambiente, como las motocicletas eléctricas.
La AMFIM está conformada por las principales marcas con presencia en México y juega un papel fundamental en el crecimiento económico del país, pues sus ejes rectores son claros:
- Actuar como un organismo representativo de los fabricantes e importadores de motocicletas en México para defender los intereses del sector y promover un entorno favorable. Esto implica establecer una comunicación constante con autoridades gubernamentales, organismos reguladores y otros actores relevantes para garantizar la adecuada legislación y regulación del mercado de motocicletas.
- Promover prácticas de conducción seguras y responsables. Trabajar en colaboración con instituciones y organizaciones relacionadas con la seguridad vial para desarrollar programas de capacitación y concientización dirigidos a motociclistas y usuarios de las vías. Además, se involucra en la promoción de normas de seguridad y calidad en la fabricación y venta de motocicletas.
- Contribuir con la fabricación y ensamblaje de motocicletas. La industria genera empleo directo e indirecto, lo que beneficia a la economía local; debido a ello, la asociación está presente y promueve el crecimiento y la inversión, lo que a su vez estimula las oportunidades laborales, así como el desarrollo de proveedores y servicios relacionados.
- Guiar hacia la movilidad sostenible en México. En respuesta a la preocupación por el impacto ambiental, la asociación reconoce la importancia de la adopción de motocicletas eléctricas y otras tecnologías limpias. Trabaja en colaboración con instituciones gubernamentales y otras organizaciones para establecer incentivos y políticas que impulsen el uso de vehículos de dos ruedas más respetuosos con el medio ambiente.
En resumen, la AMFIM desempeña un papel activo y significativo no sólo en el desarrollo del mercado de motocicletas en México, que por mucho tiempo ha seguido solo su curso; sino también en el crecimiento económico del país.
A través de su labor de representación, promoción y recopilación de datos, trabaja por el crecimiento y sostenibilidad de una industria que ha revolucionado la forma en que transitamos, trabajamos y vivimos día con día.
Por: Juan Pablo Martin del Campo Steta Presidente de la Asociación Mexicana de Fabricantes e Importadores de Motocicletas.